Temía que alguien de ojos rojos

Temía que alguien de ojos rojos la esperara oculto en la esquina y la asaltara en mitad de la noche. Ropa negra, silencio, poca luna. Un gesto, un golpe. Miedo a todo, pero más que nada a los ojos rojos. Tiró de la sábana hasta taparse la frente, se abrazó a sí misma, y cerró sus propios ojos rojos para tratar de dormir.

Author: Eduardo Abel Gimenez

0 thoughts on “Temía que alguien de ojos rojos

Dejá una respuesta