Autor: Eduardo Abel Gimenez

Algo que anoté una vez

[1/3/2002]

[1/3/2012]

Dos años después, en mayo de 2004, usé esta imagen para ilustrar la presentación de TamTam. (El link lleva al TamTam alojado en EducaRed global, donde le dieron ese aspecto. Desde principios de 2011 TamTam está inactivo, y creo que seguirá así. No se puede ver más la versión nuestra, que estaba en EducaRed Argentina.)

The Internet Archive

[1/3/2002]

The Internet Archive es un sitio que guarda miles de millones de páginas Web tal como fueron. Para mi total asombro, tienen por ejemplo el número 12 de Imaginaria, del 17 de noviembre de 1999. Y muchísimas otras cosas, que es posible buscar con la “WayBackMachine” desde la página inicial del sitio. Una maravilla, diría: la concreción de la “biblioteca universal” tan fantaseada… si no fuera por leyes de copyright demasiado restrictivas, como señala la revista Business Week.

[1/3/2012]

¡Ah, la nobleza de Archive.org! Los links funcionan, como no podía ser de otro modo. (También el de Business Week.) Diez años después Archive.org no solo sigue en pie: como la Wikipedia, fue ganando en relevancia. Además de la Way Back Machine (que ya nombré muchas veces en las notas que vengo escribiendo acá), permite subir cualquier tipo de archivo: video, imágenes, texto, música. El volumen de material que contiene es un universo en sí mismo. Tengo unas cuantas cosas ahí, como se puede ver al buscar resultados con mi nombre.

Con respecto a las guerras del copyright, el artículo de B.W. dice, entre otras cosas (Kahle es Brewster Kahle, el creador de Archive.org):

Lawrence Lessig, a Stanford lawyer who’s a critic of copyright laws, calls Kahle his “hero.” In his recent book, The Future of Ideas, Lessig outlines his view that publishing companies’ moves are endangering innovation and public access to creative works. Lessig is also the lead lawyer in a landmark case, Eldred vs. Ashcroft, that contests a 1998 law extending existing and future term limits on copyrighted works for 20 more years. The Supreme Court will hear the case in the fall.

La mala noticia es que Lessig perdió esa batalla. La extensión del período cubierto por el copyright siguió en pie. Si la Corte Suprema de Estados Unidos hubiese sido un poco menos conservadora de derecha, y considerando la influencia que ejerce ese país en la legislación sobre propiedad intelectual de todo el mundo, la tendencia sería a “vida del autor más 50 años” en vez de “vida del autor más 70”, y 75 años para las corporaciones en vez de 95; tal como era en EEUU hasta 1998. El artículo en general sigue bastante vigente, y es una lectura apasionante.

Moments of simplicity.

[1/3/2002]

Moments of simplicity.

[1/3/2012]

La verdad es que no me acuerdo para nada de qué era esto en el año 2002, y la Wayback Machine no ayuda. Pero estoy seguro de que no era lo que es ahora: Breast care, Dentures, General dentistry, Hair loss… En este momento, el post más reciente se titula “Getting that shapely figure” (“It is not astonishing that most people equate beauty with a shapely figure. If you are not feeling positive about your body and how it looks…”, etc).

“Are you passionate?”

[28//2/2002]

Are you passionate? Así se llama el disco nuevo de Neil Young, que sale en EE.UU. el 26 de marzo. La tapa es desconcertante. La música, dicen, diferente de todo lo que N.Y. grabó durante los últimos años. Los fans estamos ansiosos.

[28/2/2012]

Para mi gusto, no fue uno de sus grandes discos. Musicalmente, mi canción favorita es “She’s a healer”, la última del disco. Me encanta como la describe Greg Kot en Rolling Stone: “Like most of the album, it’s a slow-burn charmer that befits the legacy of a flannel-shirted soul man. ‘All I got is a broken heart, and I don’t try to hide it when I play my guitar,’ Young sings. And then he’s off, taking his time, each craggy note carving a path through the heartache and toward some hard-earned solace.”

Después de Are you passionate? vinieron Greendale, Prairie Wind, Living with War, Chrome Dreams II, Fork in the Road y Le Noise. En general (y siempre para mi gusto), mejores.

Y en 2006 salió la maravilla de Live at Massey Hall 1971, grabación de un concierto solista especialmente inspirado, durante uno de los grandes momentos de Neil Young. Ese disco es parte de los legendarios “Archives”, de los que salió la primera caja de ocho discos en 2009. Ejemplo en YouTube (el video no se puede insertar acá por la infinita estupidez de las discográficas: como es un video subido “oficialmente”, tiene restricciones que van en contra de sus propios intereses).

Link de yapa: el sitio oficial de Neil Young.

Haiku

[28/2/2002]

Botella, vaso,
plato, taza, palabras,
todo en círculos.

[28/2/2012]

En su momento no lo dije, pero esta es otra captura del video de mi viaje a España, 1991.

Este haiku volvió a aparecer en el número 4 de la Colección ma dri gal, una serie de pequeños libritos acordeón que hicimos con Cecilia Afonso Esteves entre 2009 y 2010, publicados originalmente en La Biblio de los Chicos. La foto de la derecha es de Cecilia, igual que las imágenes del librito. Aquí está el PDF en cuestión, para imprimir, recortar y pegar, alojado en archive.org.

Taxis sin chofer

[27/2/2002]


En Gran Bretaña están probando una especie de taxi sin chofer. Una cabina rodante que circula por un carril especial, a la que se entra (y a la que se paga) con una tarjeta magnética. Según CNN, es ciencia ficción hecha realidad.


¿Ciencia ficción? ¿Qué ciencia ficción?

Tal vez, la de Philip K. Dick. En ese caso, el taxi sin chofer se tomaría el trabajo de cuestionar los motivos del pasajero, protestaría por las malas condiciones exteriores, se divertiría buscando contradicciones y paradojas. En mitad del recorrido, el paisaje urbano se transformaría en una meseta desierta, y una voz caería del cielo como una tormenta de granizo para anunciar nuevas marcas de lubricante. El mecanismo oculto bajo el piso del taxi alcanzaría el satori. Y probablemente el pasajero también.

Tal vez, la ciencia ficción de Isaac Asimov. La fantasía blanca que yo leía de chico, donde la mayor transgresión era saltar de una acera rodante a otra, más rápida: el juego favorito de los jóvenes de “Las cavernas de acero”. En ese mundo, el taxi sin chofer andaría siempre limpio y a horario por altas cintas metálicas, bordeando ciudades de cristal junto a peatones que caminan de a dos.

Tal vez, la de William Gibson y los escritores del ciberespacio. Habría diversos modos de hackear los taxis, para viajar gratis o llevarlos más allá de sus carriles, o sellarlos para siempre y encerrar al enemigo en su interior. Todo bajo un cielo como la pantalla de un televisor que no sintoniza ningún canal (cito de memoria el comienzo de “Neuromancer”).

Probablemente, la ciencia ficción que aparece en los diarios de todos los días. Un poco de especulación: cabinas sin chofer pero con pintadas, algunas de ellas artísticas; pelotitas rodantes que se vuelcan de lado para armar barricadas; creatividad sin límites en el abuso de la habilidad del vehículo para detenerse ante un obstáculo. William Gibson empezaba a vivirla, y dio algunos pasos en la dirección correcta. Isaac Asimov no la vio en absoluto. Philip K. Dick la intuyó desde su propio universo, y eligió transformar esa realidad en mitología.

[27/2/2012]

Cansa esto de los links podridos. Por suerte anda el primero, el principal. Y también el de Philip K. Dick.

Lo de CNN ya no está, y no tengo idea de cómo buscarlo en otro lado. A Asimov y a Gibson es fácil encontrarlos, por ejemplo, en la Wikipedia. (Pero claro, a principios de 2002, la Wikipedia en inglés tenía un año de antigüedad y unos 20.000 artículos. Todavía no era costumbre buscar todo ahí.)

Unos días después de salido este post, Jorge Varlotta me mandó su versión de lo que sería el taxi sin chofer en Montevideo. Está en otro post, publicado el 2 de marzo de 2002.

Mirá, mirá

[27/2/2002]

Volvemos a casa en tren. Gabriel (6), mi hijo, me hace caer en un truco que habrá aprendido de un amigo:

—Mirá, mirá. Una gaviota.

—¿Dónde?

—Te la perdiste por idiota.

Tenemos horas que perder, así que empiezan las variantes, cada vez más surrealistas:

“Mirá, una codorniz.” “¿Dónde?” “Te la perdiste por infeliz.”

“Mirá, un pez.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste otra vez.”

“Mirá, un chorizo.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por petiso.”

“Mirá, elefantes.” “¿Dónde?” “Ya te los perdiste antes.”

“Mirá, un delfín.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por salamín.”

“Mirá, un lobo.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por bobo.”

“Mirá, un tordo.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por gordo.”

“Mirá, un renacuajo.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por comer ajo.”

“Mirá, serpientes.” “¿Dónde?” “Se te escaparon entre los dientes.”

“Mirá, un reno.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por bueno.”

“Mirá, un pastel.” “¿Dónde?” “Te lo perdiste por Gabriel.”

Y el último, ya sin rima pero con un no se qué:

—Mirá, un árbol.

—¿Dónde?

—Te lo perdiste por tronco.

[27/2/2012]

Ahora, como corresponde, es Gabriel (16), mi hijo.

Hombres lobo

[26/2/2002]

En Mar del Plata, con luna llena no hay hombres lobo, hay hombres lobo marino.

En Mar del Plata

[24/2/2002]

Estoy en Mar del Plata, con mi mujer y mi hijo. Vinimos en tren. En el camino vi un poste de los que sostienen cables que, además, sostenía un nido de hornero. Sorpresa. Creí que todos los nidos de hornero habían sido secuestrados por las escuelas.

Venía a Mar del Plata, con cierta frecuencia, cuando era chico. Mis tíos aún viven aquí. En el hotel de ellos, a los cinco años, corría persiguiendo a mis primos algo mayores, subiendo y bajando la escalera exterior, circunvalando el enorme cantero central. Hoy estuve en el Misiones otra vez, justo frente a la estación del ferrocarril. Todo tiene la mitad del tamaño de entonces. Nada original, ya lo sabemos: el pasado es enorme, y sus cosas también.

Tengo algo más que contar sobre el viaje desde Buenos Aires. Durante un par de minutos me entretuve buscando en el paisaje alguna evidencia concluyente de que no estaba en, digamos, 1959. A la izquierda del tren, la ruta es el doble de ancha: dos carriles de ida, dos de vuelta, separados por varios metros de verde, ocupados con autos de cola más alta y colores metalizados. A la derecha del tren, nada. Los yuyos parecen los mismos. Los bosques, por su parte, también. Las casas viejas probablemente están más viejas que entonces. Hay una nueva serie de postes, más altos, más espaciados, con idénticas catenarias de cables eléctricos, pero qué diferencia es esa.

Si hay alguna conclusión que sacar al respecto, todavía la estoy esperando.

[Integrado al hotel en que paramos hay un bar, y en el bar cuatro computadoras conectadas a Internet con un buen servicio de banda ancha. Cobran $1,50 por hora de uso, y cincuenta centavos más si uno agrega un café (está rico). Más arriba, en el entrepiso, mientras escribo esto, Los Javis (no se cobra derecho al espectáculo) cantan “My way”, pero en castellano.]

[24/2/2012]

El primer intento de “diario” en la Mágica Web. Los links… ¡Ah, los links! Arreglando:

[youtube https://www.youtube.com/watch?v=6E2hYDIFDIU&w=420&h=315]

Títulos de literatura infantil que jamás se van a ver

[22/2/02]

Esta lista aparece por todos lados en la Web (buscar “Children’s book titles you’ll never see” en Google), así que normalmente sólo pondría un link a alguna de esas repeticiones. Pero mi otra vida como codirector de Imaginaria me lleva irresistiblemente a reproducirla aquí. Tal vez alguien tenga ganas de hacer una traducción…

  • “You Are Different and That’s Bad”
  • “Dad’s New Wife Timothy”
  • “Pop! Goes The Hamster… And Other Great Microwave Games”
  • “Testing Homemade Parachutes Using Your Household Pets”
  • “Babar Meets the Taxidermist”
  • “Curious George and the High-Voltage Fence”
  • “The Boy Who Died from Eating All His Vegetables”
  • “Start a Real-Estate Empire With the Change From Your Mom’s Purse”
  • “The Pop-up Book of Human Anatomy”
  • “Things Rich Kids Have, But You Never Will”
  • “The Care Bears Maul Some Campers and are Shot Dead”
  • “How to Become The Dominant Military Power In Your Elementary School”
  • “Controlling the Playground: Respect through Fear”
  • “You Were an Accident”
  • “Strangers Have the Best Candy”
  • “Some Kittens Can Fly!”
  • “Getting More Chocolate on Your Face”
  • “Where Would You Like to Be Buried?”
  • “Kathy Was So Bad Her Mom Stopped Loving Her”
  • “The Attention Deficit Disorder Association’s Book of Wild Animals of North Amer- Hey! Let’s Go Ride Our Bikes!”
  • “All Puppies Go to Hell”
  • “The Kids’ Guide to Hitchhiking”
  • “When Mommy and Daddy Don’t Know the Answer, They Say God Did It”
  • “Garfield Gets Feline Leukemia”
  • “What Is That Dog Doing to That Other Dog?”
  • “Why can’t Mr. Fork and Ms. Electrical Outlet Become Friends?”
  • “Daddy Drinks Because You Cry”
[22/2/2012]

“Dad’s new wife Timothy”, tras diez años, resulta francamente discriminatorio, y por suerte sí existen libros semejantes (aunque probablemente no con ese título).

Hay listas diferentes, según dónde uno vaya. Varios que me gustaron:

  • “That’s it, I’m Putting You Up for Adoption”
  • “The Magic World Inside the Abandoned Refrigerator”
  • “Whining, Kicking and Crying to Get Your Way”
  • “You Can Fly Too If You Wear a Cape”
  • “Sharing is For the Weak”
  • “Foreigners are Bad People”
  • “Plastic Bag Space Helmet and Other Fun Activities”
  • “Razor, Razor, Who’s Got the Razor?”
  • “Is the Stove Hot Yet?”
  • “Dead Pets Are Fun Too”
  • “The New Baby is Better Than You”

(Fuentes: Funny2, The Humor Bin.)

Sigo sin encontrarlo traducido. Pero para qué, ¿no?